Nos acercamos a la zona del río Cinca antes
de llegar a Bielsa para realizar uno de los descensos clásicos de este valle.
Agreste, salvaje, deportivo, rápeles de envergadura, rodeado de bosque y ante
todo recomendable. Tiene una fuerte pendiente de aproximación por pista pero
nosotros siempre que podemos contar con medios motorizados les sacamos partido.
En este caso el Sr. Alfredo nos hace la aproximación con su antiguo vehículo, llega a sitios que los todoterreno de alta gama nuevos no pueden acceder sin una preparación previa. Evitado el pesado porteo y sudatina nos disponemos con todo el material para afrontar la actividad del día. Para las ocho y media ya estamos en el cauce, que privilegio, seremos los primeros de la jornada.
Se inicia por una serie de rampas algo
resbaladizas, varios resaltes y pequeñas marmitas que anteceden a una gran
vertical de 70 metros aproximadamente. Continuamos por una zona de barranco
menos vistosa y deportiva, donde la vegetación es el principal inconveniente ya
que la tenemos que ir sorteando continuamente.
Nuevamente entramos en un ambiente más
deportivo donde los rápeles se van sucediendo, algunos de bella ejecución.
Destacan las dos últimas verticales separadas por un gran bloque, característico
de los cañones que han sufrido desprendimientos. Concluido el descenso,
recogemos el material y nos iremos a degustar los platos típicos de la zona
para reponer las calorías perdidas.
Descendido por: Teresa, Amaya,
Aitor y Luis
Texto y fotografía: Luís Marín
No hay comentarios:
Publicar un comentario