Desde la localidad de Eulate nos dirigimos
hacia el sur de la población por una pista de hormigón que a los pocos metros
pasará a ser de grava. Durante el trayecto observaremos varias granjas junto a
los campos de cereal que darán paso a una zona menos fértil, donde el bosque de
encina y roble son los dueños. Llegamos a una vaguada, aquí confluyen varias
regatas pequeñas, nosotros seguiremos por la pista descendiendo hacia el río
Uiarra o también conocido como río Seco.
Cruzamos el puente y ascendemos un poco
hacia la ermita de San Adrián; esta se asemeja más a una borda que a la imagen
de lo que tenemos de estos antiguos templos. A escasos metros de la ermita,
junto al borde de la pista está situada la sima que recibe el mismo nombre. La
cavidad fue objeto de estudio por el grupo I.P.V. el 27-7-1974, posteriormente
se realizaron en el año 1.993 otros trabajos de cavidades en la misma zona de
Lókiz por el grupo L.E.T.
La entrada es una pequeña dolina situada
junto al talud de la pista, bordeada de alambre para evitar la caída del
ganado. Descendemos asegurados a unos modestos árboles por una abertura con
forma alargada. En los primeros metros aparece una roca muy fraccionada y
descompuesta que no ofrece garantías en caso de tener que montar un
fraccionamiento. Enseguida se amplían sus dimensiones dando a una sala de 22x16
donde los techos quedarán a unos veinte metros de altura desde la base. Tocamos
el suelo en un extremo de la sala sobre un vasto cono de derrubios que se
alarga por toda la cavidad perdiendo altura gradualmente.
Dentro de la sala observamos, por su
orientación que la pista de tránsito exterior está soportada por el techo de la
cavidad. En el cono de derrubios podemos encontrar gran cantidad de huesos de
animales (caballos, vacas, jabalís, perros…) así como basura no orgánica (latas
y envases…) algo asiduo en cavidades próximas a caminos. En el catálogo
espeleológico de Navarra se dice que esta cavidad contiene en el interior de su
sala un gran domo; pues en realidad se trata de un gran bloque desprendido del
techo con una deposición-costra de calcificación por los continuos goteos. La
sima tiene dos pequeñas continuaciones que se cierran a los pocos metros, la
profundidad máxima alcanza los 36 metros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario